miércoles, 18 de febrero de 2015

MORFOSINTAXIS DEL DESNUDO.

Repentinamente me siento tan de antaño,
con el peso de los recuerdos y del presente en la espalda.
Parece que tengo joroba, con doscientos kilos de oro falso
Soy un camello, avejentado, sediento y lagañoso,
Soy una basura, en el ojo, en la cocina, en el baño.
Me miro en el espejo y soy la arruga en la sonrisa que se tiene por herencia
se extiende a lo largo de mi cara, por mi cuello y por mi cuerpo entero
Me deshago, por que soy noventa por ciento lagrimas y me escurro por todos los rincones oscuros
Soy un puñetero fantasma que se embarra en las paredes buscando un sitio donde no llegue el frio.
Soy mariconadas de vieja amargada.
Soy ese ardor en los lagrimales, por infección y por aguantarme los putazos.
Repentinamente me siento rota y junto los pedazos de mi cuerpo con estos brazos inutiles.
y me pego con engrudo como las piñatas del mercado,
Soy la niña perdida que le llora a su mamá
Soy exactamente el tipo de mujer para hombres de más de cuarenta.
Tengo los dedos desgastados de tanto pelar.
Pelaba todos los días, todo el día, me ardian las manos
Los maízes parecen nunca acabarse.
Soy la tierra que piso y que todo mundo pisa
Repentinamente me siento tan sola.




martes, 10 de febrero de 2015

La esperanza duele.

"Ojalá la velocidad para olvidar fuera tan fácil de calcular como la distancia entre tiempo pero el amor no es una ciencia exacta"
-BS


No recuerdo mi infancia, no recuerdo lo que hice ayer, tengo tan mala memoria, pésima en realidad, tengo libretas llenas de recuerdos inútiles, tengo cartas que mandé, los borradores, tengo las cartas que recibí, tengo las fotos, tengo los hilos que ate en mis dedos y que fingi eran anillos, tengo playeras, pulceras y sonatas, tengo imágenes y tengo voces, tengo la felicidad pero también tengo la decepción y la tristeza, tengo los impulsos, tengo las decisiones, los fallos, los aciertos, los desmayos, las risas y los abrazos, los esguinces, los moretones y las cicatrices, pero son recuerdos inútiles por que ya no te tengo, no tengo el calor, no tengo tu mano en mi mano, no tengo tu mirada en la mía, ni tu brazo en mi espalda, tengo la esperanza, esa perra, esa bomba sin explotar, esa desalmada que vive constante en un rincón de tu mente a tientas de salir cuando piensas que ya no necesitas crear nuevos recuerdos, que no necesitas mas cartas, ni su mano en tu mano, esa alarma constante en intermitencia y esa constante incognita de no saber de ti misma, de no saber si ya olvidaste, por que ¿quien esta seguro de ello? Y lloras por que no olvidaste y recuerdas que habías decidido olvidar para no seguir llorando y te guardas y dejas junto con los recuerdos inútiles el nudo de la garganta y tus lágrimas y sonríes a medias.